Gonzalo lleva ya dos trimestres de Universidad. Desde entonces, ha trabajado los fines de semana en una lavandería para poder pagarse la matrícula y ayudar económicamente en casa, pero la lavandería ha cerrado y se ha quedado sin ingresos. Su padre sigue el programa laboral con la entidad y ha estado trabajando con contrato durante cuatro meses, pero la empresa ahora lo ha despedido para coger a otra persona sin contrato. Está buscando otro empleo, que seguro que lo conseguirá pronto porque es un hombre muy válido, pero hasta entonces los pagos no cesan y le agobia no poder ayudar a su hijo con la matrícula de la Universidad. Debe 300 euros pero dice que con una ayuda le basta. ¿Le ayudamos a conseguir 150 euros para que tenga un respiro?